sábado, 30 de septiembre de 2017

Tenemos voz y toca decidir

¿Quién debe decidir nuestro futuro?

¿Quién debe decidir qué haremos de aquí en adelante?

¿Quién debe decidir cuándo nos vamos de casa?

Nosotres, sí. A quienes más nos incumbe.


Y es por eso por lo que debemos ser nosotres,
el pueblo catalán,
quien decida qué pasa con nuestro futuro.

Vivimos en una supuesta democracia, y como tal,
hemos de ser nosotres quien vote para decidir nuestra vida,
para decidir si seguimos siendo o no españoles.

¿Por qué tratan de impedirnos votar?

¿Por qué no nos dejan decidir?

¿Por qué tratan de imponernos quiénes y de dónde somos?

¿Por qué estamos siendo tratades tan injustamente por querer elegir un futuro?


Y es por eso (y por mucho más), por lo que mañana,
día 1 de octubre de 2017,
iremos a votar.

Queremos decidir pacíficamente,
y se nos está imponiendo por la fuerza
que no votemos.

España, si tanto quieres que sigamos contigo,
danos motivos de verdad.
Danos una razón para votar "No",
pero no nos prohíbas votar y menos con amenazas.

Hacéis que esa maravillosa palabra llamada democracia
se convierta en una tan horrible como lo es fascismo.
Hacéis que este país sea un infierno.

Y nos quitaréis urnas,
papeletas,
carteles,
pero hay algo que jamás nos quitaréis:
la voz.

Vamos a hacernos oír,
sea para irnos o para quedarnos.
Tenemos voz,
y toca alzarla;

Vamos a votar.

jueves, 17 de agosto de 2017

Barcelona

Siempre has sido esa chica con la que disfrutaba pasar tiempo,
esa chica que consideraba el amor de mi vida,
con quien quería irme a vivir.

Llevo siete meses viviendo contigo,
enamorándome aún más de cada detalle de ti.
Has sido esa chica a la que muchos adoraban y amaban,
con la que querían pasar el rato, las vacaciones enteras.

Barcelona, hoy te sigo amando y siento pena por ti.
Pena por ti y por todas esas personas que han perdido la vida
por visitar tus calles.

Te han hecho víctima de un atentado
y no entiendo quién querría
atentar contra alguien que se hace ser amado.

Hoy te han hecho daño y
—directa o indirectamente—
nos han hecho daño a todos los habitantes
y a todos los visitantes
de tus caderas.

Barcelona, no te vas a derrumbar.
Te seguiremos amando,
pase lo que pase,
por mucho miedo que tengamos.

El terrorismo no podrá contigo,
el odio no inundará tus calles.
Te queremos,
y te queremos entera.

Barcelona,
seamos fuertes.

lunes, 31 de julio de 2017

Porque tú eres tú

Quería darte las gracias...

Porque, ya lo sabes,
tú me has dado alas
y ahora me toca aprender a volar.

Porque tú has sido mi profesor de ciencias
y me has dejado estudiar la anatomía de una sonrisa,
me has dejado estudiarte,
estudiar cada milímetro de tu cuerpo,
y así es cómo he aprendido sobre artes:
ahora sé cómo dibujarme una sonrisa yo.

Porque, ya lo sabes,
tú me presentaste a una chica
y la nombraste Felicidad.

Porque tú has sido calma,
hogar, patria, nación,
paz, calidez, armonía.
Has sido poesía,
canción, acordes, melodía,
la manta con la que arroparme.

Porque, ya lo sabes,
tú me sacaste de la oscuridad
y me enseñaste a vivir.

Y quería darte las gracias
porque tú...
Eres tú.

viernes, 16 de junio de 2017

Fuera armadura

Salí a la calle un día cualquiera de diciembre,
con mi armadura equipada, impenetrable.
Y fue entonces cuando apareciste tú
y provocaste un pequeño rasguño en mi armadura,
haciendo que se resquebrajara.

Y quién me iba a decir que en febrero
acariciarías mi armadura
y se empezaría a deshacer en tus dedos.
Y que con el tiempo lograrías romperla,
y me vería desnuda frente a ti.

(Desnuda...

            ...pero segura.)

Ahora me veo vulnerable
pero, si es contigo, no me importa.
No me importa; has supuesto un cambio,
una mejora, una alegría:
felicidad.

Que si es contigo,
haría cualquier cosa.
Porque todo vale la pena
si eres tú quién me coge de la mano.

No dudaría en saltar al abismo
sin paracaídas, sin seguro de vida, sin nada,
si así tuviera la certeza
de que tú correrías detrás mío
a cogerme antes de que caiga.

Que sí, que hablo mucho y digo poco,
y me repito sin parar:
pero porque no hay suficientes palabras en el diccionario
para explicarte cómo me haces sentir,
para explicarte que me pasaría la vida entera en tus brazos.

Perdóname por decirte que te quiero,
perdóname por ser así.
Es que me has quitado la armadura
y perdóname, pero no puedo evitarlo,
creo que me estoy enamorando de ti.

Y es que perdóname,
pero sólo tú me haces sentirme desnuda,
desnuda y vulnerable,
vulnerable pero protegida,
protegida y segura.

De verdad que debes perdonarme
y debes ser consciente de que todo esto es tu culpa.
Tú me has roto la armadura,
tú eres el culpable
de que yo me esté enamorando.

jueves, 25 de mayo de 2017

Hermanos

Te conocí la noche de un 25 de mayo
y jamás pensé que llegaríamos a ser tanto.

El alcohol pudo conmigo y me acerqué;
sabía que debía hacerlo.
Y sigo sin saber por qué.

Te conocí por puro azar
y jamás pensé que sería una decisión tan acertada.

Al principio hablar contigo era extraño,
pero por alguna razón era agradable
y acabamos siendo amigos.

Te conocí y me acerqué sin siquiera saber tu nombre,
pero eso realmente tampoco es que importe.

Me llevó año y medio considerarte mi mejor amigo,
y a día de hoy, ya no lo somos ni lo seremos jamás.
Somos mucho más que eso.

Te conocí sin pensar que podrías ser algo más que un simple colega,
y míranos ahora.

Y aunque hubo malentendidos y distancia
siempre me acababa acordando de ti:
echándote de menos, sin decir nada.

Te conocí y jamás consideré que llegaríamos a algo más,
que serías alguien con relevancia en mi vida.

Y es que no importa el tiempo que pasemos lejos,
serás, para siempre,
el hermano al que quiero.


(Felices cuatro años a tu lado.)

domingo, 14 de mayo de 2017

Tres senderos: sentido

El hilo se quiebra,
el camino se esclarece.
Se aproxima la hora:
en breve tocará saltar.

Hay tres senderos:
El primero, empieza a ser peligroso.
El segundo, me trasmite felicidad.
El tercero, es la opción cada vez más descartable.

Cada camino cobra su sentido

—para bien y para mal
y tengo claro que no pienso ahogarme:
ahora toca aprender a nadar.

Y en este punto

sé qué desvío me conviene más.
Sé cómo hacer para acercarme a ti,
mi tan anhelada felicidad.

Los tres senderos me harán renunciar a algo:

El primero, a la alegría.
El segundo, a la tristeza.
El tercero, a todo.

Ya está tomada la decisión:

he encontrado la brújula que marca el camino.
Ahora sólo falta encontrar la hora adecuada
para dejarme guiar por el camino que persigo.

Y me estoy volviendo a encontrar a mí misma
en este horrible sendero.
Todo empieza a cobrar sentido
y, en breve,
habré alcanzado la meta.

viernes, 5 de mayo de 2017

Prométemelo

Por favor, prométeme una cosa:
jamás te conviertas en otro de esos poemas míos
que hablan sobre cómo intento superarte
sin ningún porcentaje de éxito.

Dime que he perdido la cordura
cuando digo que quiero una vida contigo.
Dime que he perdido el norte
haciendo de ti, mi brújula.

Pero por favor, prométeme una cosa:
no será tu ausencia causante de mis desvelos,
esos en los que cuestiono si de verdad me quisiste
y acabo sin una conclusión, llorando como si fuese un «no».

Y dime que estoy exagerando
cuando hablo de todas tus virtudes.
Y dime que estoy ciega
porque te miro y no veo a alguien imperfecto.

Por favor, prométeme una cosa:
serás tú sobre quien hable
cuando hable sobre amor,
y sobre cómo conocí a Felicidad.

Dime que todas las rosas tienen sus espinas,
que en algún momento me pincharé acariciándote.
Dime que tus pétalos caen como el resto,
y yo haré lo posible para que nunca lo hagan.

Y por favor, prométeme una cosa:
no vas a permitir que deje de escribirte.
Serás la rosa que dure para siempre:
el protagonista de mis sonrisas.

Prométemelo:
seremos eternos.